lunes, 25 de enero de 2010

CUENTO DE LUNES


NOSTALGIA

Cuando abro los ojos, lo primero que veo es su mirada, quieta, pacífica, extraviada, como si supiera que el mundo que corre detrás de él no tiene destino, pero sí un final trágico.

No suelo ver muchas fotografías pero esta es particularmente cautivadora, ya no recuerdo cuando la tomé, está deslustrada, sucia, derramando el polvo que nada perdona, ni siquiera este pedazo de papel fotográfico que recién había encontrado en el cajón de lo que archivo sin tener un objetivo específico.

La última vez que guardé algo, fueron unas llaves que solían abrir un lugar que ya no frecuento y que sin embargo ya no sé si aún exista, tal vez ha desaparecido como suelen desaparecer muchas cosas de las cuales ya no te acuerdas. Tal vez no físicamente pero, en tu mente todo ese universo implota y desaparece, es un suceso extraño pero a mí me suele pasar cada cierto tiempo. Y no es que tenga una rutina para esto, no soy de esas personas.

Lunes, color rojo, martes comer vegetales verdes, miércoles una lectura al libro escogido..., por supuesto que no soy así, aunque recuerdo que cuando ella vino a visitarme dos días atrás me echaba encara una "odiosa rutina" y yo no sabía que quería decir, porque no suelo ser así. Odio la rutina, y odio cuando me dicen que soy rutinario cuando no lo soy. No ahora, ahora solo es la nostalgia que me invade, me transforma, me desborda... ahora que estoy atado a esta silla de ruedas, todo es tan diferente... y es que ahora que recuerdo antes sí solía ser rutinario.

Luis E. Olivares Guevara

PD. Feliz inicio de semana. Esta semana el número 18 de Fuera de Contexto. Y sigue la mata dando.

No hay comentarios: